"Y hacía que a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y esclavos, se les pusiese una marca en la mano derecha, o en la frente; y que ninguno pudiese comprar ni vender, sino el que tuviese la marca o el nombre de la bestia, o el número de su nombre.  Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia, pues es número de hombre. Y su número es seiscientos sesenta y seis" (Apocalipsis 13:16-18).

Esta señal del anticristo, o sea, la cifra de su nombre será colocada en el lugar más visible, en la frente, pero si alguien se opusiera preocupado por la belleza de su rostro, le será permitido recibir la marca en la mano derecha.  Esta práctica cambiará las identificaciones y los pasaportes.  Los documentos de papel no serán prácticos, tomando el asunto a nivel mundial.  Estos pueden ser alterados, extraviados, dejados en casa, robados o destruidos.  Pero una marca profundamente tatuada en la piel quedará para siempre junto a su dueño.

El sello del anticristo debe ser visible para todos los hombres, tanto para los que compran como para los que venden.  ¿De qué manera pudiera un vendedor corriente reconocer quién tiene el punto de vista del anticristo o quién hace las obras del anticristo?  Por eso está claro que la marca del anticristo será visible y grabada en tal lugar que sea fácil y rápidamente posible exhibirla.  Sin duda, la marca será muy común, porque será compuesta de un solo nombre o bien el número de ese nombre.

Todavía no sabemos el nombre del anticristo.  Es un misterio, pero el número de su nombre nos es revelado, su número es 666.  Muchos hombres incompetentes se han hecho problemas para considerar el misterio de esta cifra y así adivinar el nombre del anticristo, pero todos esos esfuerzos han sido inútiles.

Debemos entender que entre los antiguos hebreos, griegos y romanos, las letras eran al mismo tiempo también números.  Por eso, no sólo cada nombre, sino aun cada palabra, significaba algún número.  Especialmente los griegos y los romanos con frecuencia consideraban el número del nombre como nombre o en lugar del nombre, toda vez que deseaban mantener en secreto el nombre.  Conociendo especialmente o bien la particularidad de los idiomas antiguos, los hombres han hecho pruebas de identificar y esclarecer el terrible nombre del anticristo.  Por ejemplo, cuando se escribe en el antiguo hebreo "César romano", la combinación del valor de las letras dará un total de 666.  Por eso los cristianos, de entre los hebreos, pensaron que los césares romanos eran anticristos.  Cuando Nerón comenzó su furiosa persecución contra los cristianos, los mártires llegaron a la conclusión de que al escribir en hebreo "Nerón César", también resultaba la cifra de 666.  Por ellos estaban persuadidos de que Nerón era en un cien por ciento el anticristo.  De esto vemos que para los cristianos primitivos, Roma o romanos, los césares, Nerón, eran la encarnación del anticristo.

Hay muchos nombres y títulos, los cuales, si se les coloca en su valor numérico, su resultado será esta cifra fatal.  Por eso resulta tan difícil establecer el verdadero nombre del anticristo.  No obstante nosotros podemos decir con certeza una sola cosa: que cuando aparezca el anticristo y su nombre ya se conocerá, entonces al escribirlo en lengua hebrea, tendrá el número 666.

Aparte de esto, el número 666 tiene también significado espiritual.  En general, en las Sagradas Escrituras, los números tienen con frecuencia sus significados particulares.  El número 3, el número de Dios (Trinidad); 4, es el número de la tierra (cuatro puntos cardinales, cuatro estaciones del año, etc.); 12, es el número del pueblo de Dios (doce tribus de Israel, doce apóstoles de Cristo, doce fundamentos y doce puertas de la nueva Jerusalén, donde el pueblo de Dios vivirá eternamente).  Por último, la cifra 6 es humana (el hombre fue creado el sexto día, seis días han sido dados a disposición del hombre).

Pero el hombre que cayó o se apartó de Dios, se constituyó en símbolo de desobediencia, de caída, de incredulidad y de todo mal.  De manera que este número de los hombres, 6, se multiplicará en el caso del anticristo.  Por eso 666 es la suma multiplicada de la imperfección del hombre, la multiplicación de la caída del hombre de Dios, será la plenitud de la maldad del hombre.
 

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