El primer paso en el entrenamiento de nuestros hijos es que debemos darnos cuenta que la responsabilidad que ha sido designada por Dios es nuestra, y particularmente la del padre.
"Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes." (Deuteronomio 6:6-7)
"Instruye al niño en su camino, y aun cuando fuere viejo no se apartará de él." (Proverbios 22:6)
"Y si mal os parece servir a Jehová, escogeos hoy a quién sirváis; si a los dioses a quienes sirvieron vuestros padres, cuando estuvieron al otro lado del río, o a los dioses de los amorreos en cuya tierra habitáis; pero yo y mi casa serviremos a Jehová." (Josué 24:15)
"Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor." (Efesios 6:4)
El segundo paso es que debemos darles el ejemplo de lo que queremos que sean. Al final nuestros hijos serán lo que somos nosotros. Debemos vivir la vida ejemplar en privada y en pública constantemente. Producimos lo que somos no lo que enseñamos. Nuestras acciones y vida se escuchan con mas claridad de lo que les instruimos.
"Dame, hijo mío, tu corazón, y miren tus ojos por mis caminos." (Proverbios 23:26)
"Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas. Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; y las repetirás a tus hijos..." (Deuteronomio 6:5-7)
El tercer paso es instruirles la Palabra de Dios en toda ocasión posible. Deuteronomio 6:7 dice: "y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes." Esta tarea requiere que la Palabra de Dios esté guardada en nuestros corazones. Por eso, mi esposa y yo memorizamos nuevos versículos cada día. Es un trabajo que nunca se acaba, digamos, día y noche. Sin embargo, a nosotros nos conviene tomar un tiempo diario para leer las Escrituras en la casa, entrenando a nuestros hijos no solamente en las historias de la Biblia pero también en las lecciones practicas para la vida cotidiana. ¡Que la Palabra de Dios sea la cosa mas importante es su hogar!
INSTITUTO EDUCATIVO
CRISTIANO
Apartado 955
01901 Guatemala, Guatemala