El oficio de pastor no es un nivel social o educacional, sino un llamado de Dios (Efesios 4:11).  Si Dios le ha llamado a predicar la Palabra de Dios, es necesario que usted cumpla los requisitos dados en las Escrituras.  El deseo o anhelo para el ministerio no niega la obligación de conformarse a las cualidades necesarias para ser buen ministro de Dios.

El apóstol Pablo fue un hombre que se entregó a la preparación de pastores.  En varias de sus epístolas él nos da las guías para saber los requisitos de un predicador.  A continuación le daremos algunos de ellos:
 

1. Debe ser un hombre.  La Biblia prohíbe que las mujeres hablen y enseñen en la iglesia (1 Corintios 14:34-35; 1 Timoteo 2:11-12).

2. Debe ser discípulo del Señor Jesucristo manifestando en su vida que se ha arrepentido y que ha recibido por fe al Señor Jesucristo como su único y suficiente Señor y Salvador (1 Timoteo 4:12; 2 Timoteo 1:5).

3. Debe haber recibido el llamamiento del Señor para predicar (Efesios 4:11; Hechos 13:1-4; 1 Timoteo 3:1).

4. Debe haber cumplido la lista de las virtudes en 1 Timoteo 3:1-7 y Tito 1:5-9.

5. Si es casado, se debe haber casado solamente con una mujer, o sea, no divorciado (1 Timoteo 3:2; Mateo 19:8-9).

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